Este posteo lo traigo de un blog que tuve, (en realidad sigue online perdido en el ciberespacio pero no lo actualicé mas). Lo adapté un poco pero su esencia sigue igual. Lo escribí el 10/06/2019.
Habla sobre El Viaje del héroe, y dice así:
Estoy haciendo un taller online sobre creatividad. Tomo prestada esta imagen (la imagen principal de este posteo) que me llevó a estas reflexiones. También dejo un link de la música que me inspiró en su momento. Pido disculpas por la redacción, fue tal cual me salió.
Pensando cuándo surgieron mis viajes internos, llego más o menos a mis 18 o 19 años podría ser. Recuerdo estar leyendo libros de Paulo Coelho, digamos que en su momento me hicieron bien. Me sentía muy perdida, adolescente, no me conformaba con el mundo material. Creo que ahí empezó mi viaje, o al menos tengo noción.
Recuerdo estar corriendo, haciendo ejercicio, y sentirme feliz sin saber porqué. Disfrutar los perfumes de primavera, observar las coincidencias «locas» de la vida, que hacen que todo se vuelva mágico. Este estado no perduró hasta ahora, sino que fue y vino miles de veces. Puede que sean mis viajes al mundo desconocido o mágico y mis regresos a este mundo «normal». Está bueno pensarlo de esa manera.
Con el paso por la universidad, se me acotaron mis viajes, siempre tenía que estar estudiando. Cuando terminé o simplemente se me fue alivianando el camino, empecé a disfrutarlo nuevamente y a sentir ese corazón lleno al ver, por ejemplo, las hojas de los árboles moviéndose por el viento. O que justo un pájaro se pose en el cable de luz y me cante.
También recuerdo en mis comienzos de estos viajes, meditar escuchando un tema de Moby, sin siquiera saber que estaba meditando. Esto puede que haya ocurrido alrededor de mis 13 años, así que hasta quizás de niña he entrado en el Mundo especial del Viaje del héroe. Escuchar ese tema de Moby ,viajar y volar, esos eran mis otros mundos. Qué lindo!
Celebro poder irme cuando quiero o cuando puedo, hace que la vida sea fantástica y llena de infinitas sorpresas. Aquí el link a la canción que me hacía viajar.
Y volviendo al 2025, sigo yendo y viniendo a ese mundo especial. Entendiendo un poco mejor de qué se trata porque la vida no es, para mí, sólo lo material, lo físico. Somos energía, vibración, colores, emociones, pensamientos, deseos... somos infinitos.
Hasta luego.
Ce.